
Panam, una icónica marca 100% mexicana de calzado deportivo fundada en 1962, ha logrado mantenerse vigente y competir con gigantes extranjeros como Nike y Reebok gracias a una innovadora estrategia basada en colaboraciones virales y relanzamientos que apelan a la nostalgia. La empresa, originaria de Naucalpan, Estado de México, ha preservado su identidad con productos manufacturados en el país y con el lema “Producto Auténtico Nacional Mexicano”.
El impacto negativo de tratados internacionales como el TLCAN en el mercado nacional y la competencia de calzado importado amenazaron su permanencia, pero Panam respondió diversificando su oferta, ampliando colores y diseños, y adaptando sus clásicos modelos a nuevas formas como botas reinventadas en 2017. La nostalgia ha sido un factor clave en su resurgimiento, además de la expansión a ropa y accesorios deportivos.
Uno de los principales motores para mantenerse en el gusto de los consumidores han sido las colaboraciones con marcas y personajes populares, incluyendo a Dr. Simi, Marvel, Toy Story y más reciente con Totis, con lanzamientos que generan gran interés por sus detalles y coleccionabilidad. La estrategia ha permitido llegar a diferentes públicos, especialmente a jóvenes.
En un contexto favorable, el gobierno mexicano impuso recientemente cuotas compensatorias a la importación de calzado chino que entra al país a precios por debajo del mercado, buscando proteger a la industria local. Esta medida abre nuevas oportunidades para firmas nacionales como Panam y Flexi, al incentivar la producción y venta de calzado hecho en México y fortalecer el mercado interno.



































































































