
La cadena de tiendas minoristas Waldo’s anunció su disposición para colaborar con las autoridades en la investigación de la explosión ocurrida en su sucursal del centro de Hermosillo, Sonora. El incidente causó la muerte de 23 personas, entre ellas adultos y niños, y dejó a 12 personas más heridas.
Testigos relataron que el suministro eléctrico se interrumpió dos veces antes de que se escucharan dos explosiones consecutivas. En consecuencia, la Fiscalía General de Justicia de Sonora descartó que el evento haya sido un atentado y atribuyó las muertes principalmente a la inhalación de gases tóxicos, con algunas víctimas que además sufrieron quemaduras severas.
Según las autoridades, la hipótesis principal apunta a un accidente originado por un transformador eléctrico ubicado dentro de la tienda, encargado de regular el voltaje. Sin embargo, aún se está a la espera del peritaje oficial, ya que los cuerpos de emergencia continúan con la remoción de escombros y valoración estructural del lugar.
El gobernador de Sonora, Alfonso Durazo, informó que ha ordenado una investigación minuciosa y transparente para esclarecer las causas y deslindar responsabilidades. La presidenta Claudia Sheinbaum expresó sus condolencias a las familias afectadas y anunció el envío de apoyos a través de la Secretaría de Gobernación para atender a los heridos y parientes de las víctimas.
Waldo’s lamentó profundamente lo ocurrido y ratificó su solidaridad con todos los afectados, asegurando que brindará el apoyo necesario para afrontar las consecuencias del siniestro.



































































































