
Elon Musk ha iniciado una disputa legal significativa al presentar una demanda contra Apple y OpenAI, acusando a ambas compañías de formar un acuerdo anticompetitivo destinado a dominar el mercado de inteligencia artificial (IA) y bloquear a sus competidores. La acción legal fue presentada por las firmas del empresario, incluyendo su startup de IA, xAI, y su plataforma social X, ante un tribunal federal en Texas.
En la demanda se alega que Apple usó su posición en la App Store para minimizar la visibilidad de aplicaciones rivales que ofrecen servicios de IA generativa, tales como Grok, desarrollado por xAI, mientras promovía de manera privilegiada a OpenAI al integrar directamente ChatGPT en dispositivos iPhone, iPad y Mac. Musk sostiene que esta alianza busca mantener un monopolio en el sector de smartphones y frenar la innovación de otros desarrolladores en IA.
Este conflicto refleja una tensión más profunda, ya que Musk fue cofundador de OpenAI en 2015 pero se distanció en 2018 ante diferencias internas. Desde entonces, ha manifestado críticas contra la orientación comercial que ha tomado OpenAI, alejándose de su misión original de beneficiar a la humanidad con inteligencia artificial. Sam Altman, CEO de OpenAI, respondió señalando que las acusaciones de Musk buscan beneficiar sus propias empresas.
Por su parte, Apple mantiene que su App Store opera de manera imparcial y sin favoritismos. Usuarios y otras empresas rivales han logrado posicionarse en los rankings de aplicaciones pese a esta polémica. Este enfrentamiento legal pone de manifiesto cómo el mercado de la inteligencia artificial se ha convertido en un terreno de competencia feroz entre grandes corporativos, donde las consideraciones sobre innovación se entrelazan con acusaciones de prácticas monopólicas.