
La inteligencia artificial (IA) continúa siendo un foco central en los mercados globales, con analistas liderando movimientos importantes en este sector, pero también manifestando cautela por las valoraciones actuales. Recientes actualizaciones por firmas reconocidas muestran un panorama mixto en el desempeño y perspectivas de empresas tecnológicas involucradas en IA.
Una mejora relevante proviene de Truist Securities, que elevó su recomendación para Advanced Micro Devices (AMD) a Comprar desde Mantener, ajustando su precio objetivo al alza a 213 dólares. Este ajuste refleja un cambio en la percepción de la industria, donde AMD ha ganado un rol destacado en centros de datos y aplicaciones de IA, especialmente con clientes de hiperescala que empiezan a considerarla como un socio estratégico, algo que antes se limitaba a considerarla una alternativa de precio frente a Nvidia. Los analistas destacan que la participación de AMD en GPUs podría estabilizarse en un rango de mercado cercano al 10%, resaltando el potencial del chip MI355 lanzado en junio.
Por otro lado, UBS advierte que las valoraciones en acciones del sector IA se encuentran en niveles históricamente comparables al máximo alcanzado durante el auge de las puntocom, lo que genera inquietudes sobre la sostenibilidad de estas valoraciones. Según su modelo HOLT Economic, muchas valoraciones actuales se basan en expectativas de flujo de efectivo futuro más que en ganancias concretas, dejando poco margen para errores o decepciones. Además, el gasto en capital por parte de las principales empresas tecnológicas estadounidenses supera los 350 mil millones de dólares en el año en curso, cifra que sobrepasa ampliamente la inversión combinada de empresas energéticas y de servicios públicos en EE.UU. y Europa. Sin embargo, el CEO de OpenAI, Sam Altman, ha reconocido públicamente la posibilidad de que el sector se encuentre en una burbuja.
En cuanto a perspectivas específicas, Bank of America redujo la calificación de Marvell Technology a Neutral desde Comprar, señalando una confianza menor en el crecimiento a corto y mediano plazo en IA para la empresa, afectada por incertidumbres relacionadas con proyectos específicos de Microsoft y Amazon. A pesar de ello, el banco destaca la sólida valoración y flexibilidad financiera de Marvell.
Finalmente, la empresa Ambiq Micro, especializada en chips de baja potencia para IA en el borde, fue cubierta recientemente por varias instituciones. Stifel otorga una recomendación de Compra, valorando su plataforma SPOT como un diferenciador clave para capturar la emergente oportunidad de IA en el borde. No obstante, UBS y Bank of America mantienen una visión más cautelosa, señalando que la rentabilidad podría demorarse hasta 2028 y que la compañía depende de un pequeño número de clientes.
Por su parte, RBC Capital Markets desestima la idea de que la IA acabará con la programación tradicional, argumentando que la narrativa de la “muerte de la programación” está sobrevalorada. El banco prevé que la IA beneficiará a ciertos incumbentes aunque también acelerará la competencia y consolidación en el sector, con una adopción empresarial generalizada que podría extenderse hasta 2028 o más adelante.
En este contexto, expertos aconsejan que los inversores mantengan una diversificación adecuada, explorando oportunidades no sólo en compañías estadounidenses de IA, sino también en valores globales y sectores como bienes raíces, energía y comunicaciones, que tradicionalmente presentan baja correlación con las tecnológicas.
Este análisis refleja tanto el entusiasmo como la prudencia que caracteriza actualmente al sector tecnológico y a la inteligencia artificial en los mercados financieros.