
La producción de gasolina en la refinería Dos Bocas, operada por Petróleos Mexicanos (Pemex), experimentó una caída significativa del 27% durante julio de 2025. Los datos oficiales indican que la planta elaboró un promedio de 57,300 barriles diarios de gasolina, frente a los 78,600 barriles reportados el mes anterior. Este nivel representa apenas un tercio de la capacidad instalada de la refinería, que es de 170,000 barriles diarios.
Dos Bocas, proyecto emblemático desarrollado durante la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, ha enfrentado diversos retrasos desde su apertura en julio de 2022. La intención original del gobierno federal era que la instalación operara a máxima capacidad desde el inicio, pero la producción comercial comenzó dos años después de su inauguración. Además, el costo final de la construcción superó los 18,000 millones de dólares, más del doble del presupuesto inicial asignado.
Actualmente Pemex atraviesa un proceso de reestructuración operativa y financiera debido a una deuda que asciende a cerca de 98,800 millones de dólares. La compañía también arrastra impagos a proveedores y enfrenta la producción más baja de petróleo en cuatro décadas. Su división de refinación ha reportado pérdidas trimestrales, mientras el gobierno persiste en su política de buscar autosuficiencia energética en gasolina, diésel y turbosina desde 2018.
La caída en la producción de Dos Bocas plantea desafíos para esta estrategia energética, mientras Pemex encara presiones financieras y productivas que impactan su desempeño en el sector petrolero mexicano.